Ada Soriano y Principio y fin de la soledad o Entre la mecedora y la luna Antonio Enrique, en el prólogo de Principio y fin de la soledad, 2011 , anuncia que “los motivos de la poesía de Ada Soriano son la maternidad, el mar, la luna, los niños, los animales, la gente”. Yo añadiría que la mujer sobre todo. La luna, a fuerza de luz y de metáforas aparece con frecuencia a lo largo del libro con distintas tonalidades a través de un paisaje que intuyo más bien nocturno. Una luna galáctica, por lo de ser reservorio de leche en varias de las composiciones. La escritora reflexiona a través del corazón, desde el leve y sistemático balanceo de su mecedora, a la que está hecho su cuerpo. En el poema con que comienza la obra, que da nombre al conjunto, vemos como “la luna se recuesta | en la cumbre penumbrosa | en forma de balancín”. Una luna que se mece en un monte; y más adelante, avanzada la composición observa que “la luna ilumina mi huella en el camino | y me cont...